Granja escuela, una nueva forma de enseñar a los niños
Todo niño necesita recibir la mejor educación para que crezcan con suficientes habilidades para enfrentar al mundo. Pero, una buena preparación no solo debería recibirse en el colegio, entre las cuatro paredes de un salón de clases. Ellos necesitan ponerse en contacto con otros ambientes para descubrir lo que les rodea y el lugar ideal para que conozcan otras realidades es una granja escuela.
Estos espacios están protagonizados por la magia de la naturaleza, con la que van a interactuar de una forma consciente y programada. Hoy en día, muchos padres apuestan por estos escenarios para que los chiquitines realicen actividades extraescolares, para que se diviertan y obtengan conocimientos nuevos.
Anteriormente, se creía que vivir esta aventura no era lo más apropiado para los pequeños de la casa, porque debían estar cerca de plantas o animales que podían transmitirles enfermedades. Sin embargo, la experiencia ha demostrado que esa creencia está muy lejos de la realidad y, por ende, es una fuente rica de información para ellos que poseen un planeta entero que explorar.
En este sentido, la misión de una granja escuela es abrirles las puertas de lo natural a estos pequeños seres humanos que necesitan aprender y, por lo tanto, deben proporcionarles estos datos desde diferentes ópticas. Por ejemplo, valorar los principios de la ecología en la vida cotidiana y entender que los envases PET tienen la máxima eficiencia energética.
De esta manera, los niños empiezan a observar lo que está a su alrededor con otra visión y pueden llevar a cabo ciertas iniciativas interesantes para mejorarlo. Por consecuencia, podrán trasmitirles esta información a otros compañeros que no hayan vivido todavía estos encuentros y promover valores que quedarán arraigados para siempre.
Otras razones para visitar una granja escuela
Además de estas ventajas, estas dinámicas son excelentes para fortalecer el crecimiento de los jóvenes, ya que aporta los siguientes beneficios:
- Se considera como un recurso educativo infalible, puesto que logran ver el desenvolvimiento de los seres vivos en su hábitat.
- Aprenderán sobre diferentes especies de animales y la importancia que guardan en los ecosistemas.
- Impulsa la educación ambiental y la protección del ambiente.
- Fomenta el establecimiento de relaciones sociales.
- Estimula la observación.
- Favorece la autonomía y la evolución personal.
Por lo general, estos grupos suelen adaptar el proceso de aprendizaje a la edad de los visitantes, con el objetivo de garantizar el alcance de las metas. Una gran cantidad de escuelas planifica estas visitas y, posteriormente, hablan sobre lo que vivieron allí.
No hay dudas de que este instante especial se convertirá en una de las mejores aventuras de sus hijos. Y es que, definitivamente, vale la pena darles la oportunidad de que descubran lo que está ante ellos, pero con una mirada curiosa e inteligente.